Las excusas para no cocinar y cómo terminar con ellas

Nuestros estilos de vida influyen en la forma en que comemos. Por lo general, nos falta tiempo y resolvemos  la comida en el momento. Entonces, solemos optar por algo rápido, comprado afuera o que pedimos por delivery.

Por otro lado, hay tanta información cruzada, productos y dietas de moda que nos sentimos abrumados y vemos a la comida como un mundo en sí mismo que parece bastante complicado.

¿Pero qué sucedería si preparar platos caseros, ricos y saludables fuera más fácil?

A veces ponemos excusas para no cocinar, por ejemplo:

  •  “NO SÉ COCINAR”

Creemos que para preparar una rica comida necesitamos contar o bien con un don o bien con un título de chef profesional.  Pero en realidad solo es cuestión de empezar, de seguir una receta y de ir probando nuevas. ¡A cocinar se aprende cocinando!

  • “COCINAR ES MUY DIFÍCIL”

Si bien hay preparaciones que llevan tiempo o son más elaboradas, también hay otras que pueden resolverse de manera fácil y rápida y que a la vez son muy sabrosas. ¡Comenzar es fácil!

  •  “NO TENGO TIEMPO PARA PREPARAR LA COMIDA”

Suele pasar que vivimos a las corridas. Pero, de todas formas, en una tarde del fin de semana podemos preparar algunos platos y guardarlos en el freezer para comer a lo largo de la semana. Además, podemos cocinar juntos o por turnos y así darnos tiempo para disfrutar de diferentes preparaciones.

  • “COCINAR ES MUY CARO”

Es cierto que hay preparaciones que llevan determinados ingredientes que por escasos o poco habituales pueden costar más. Pero también es verdad que se pueden hacer diferentes platos con ingredientes básicos o clásicos. Por ejemplo, podemos hacer pastas con vegetales salteados, y así usar fideos de paquete y las verduras que tengamos en casa.

  • “ME FALTAN INGREDIENTES”

A veces tenemos una receta en mente pero no compramos todos los ingredientes necesarios. Podemos hacer algunas adaptaciones a la receta original o también podemos reemplazar algunos ingredientes por otros más económicos o que tengamos en casa como algunos cortes de carne, especias para condimentar, otro tipo de aceites o los vegetales que nos hayan quedado.

  • “ME CANSÉ DE COCINAR SIEMPRE YO”

¡No tiene que cocinar la misma persona siempre! Ni hay por qué hacerlo en soledad. Podemos hacer un calendario de cocina o dividirnos comidas o incluso hacer un plan de fin de semana para cocinar juntos.

Si vemos a la comida como una oportunidad de crear, de inventar, de mezclar sabores y de tener realmente el control de lo que comemos podemos cambiar de perspectiva y sentir que a través de lo que cocinamos nos superamos a nosotros mismos. ¡Cocinar puede empoderarnos! Porque somos conscientes de lo que comemos y de los ingredientes que forman nuestro plato, lo cual puede convertirse en una forma de cuidar nuestra salud.

Entonces, si cambiamos la perspectiva y en vez de ver a la comida casera como una carga la vemos como una oportunidad de compartir, de crear platos y de volvernos más saludables, ¡vamos a ver que cocinar nos hace bien!

En nuestra web tenemos recetas para cada comida del día. ¿las vieron? ¿Se animan a preparar alguna?

Foto de Comida creado por freepik – www.freepik.es</a>