Los momentos compartidos suelen incluir comida, desde una reunión en torno al mate a un encuentro con platos más elaborados. Pero en este contexto tan particular, en el que tenemos que quedarnos en casa, podemos revalorizar esos pequeños momentos que tenemos juntos para aprovechar a cocinar y a comer en familia.
Siempre que podamos, y con un poquito de tiempo y algo de planificación, podemos crear hermosos recuerdos para todos, mientras aprendemos a comer de manera más saludable.
Por eso, este mes nos propusimos enfocarnos en promover recomendaciones e ideas para que podamos lograr la mayor nutrición con el menor presupuesto.
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Podemos involucrarnos para comer saludable, rico y económico.
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Podemos aprender más para aprovechar al máximo los recursos con los que contamos.
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Podemos comprar local y de estación, para conseguir frutas y verduras a precios más convenientes.
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Podemos cocinar en casa, para obtener platos más económicos y saludables.
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Podemos involucrar a los chicos en la preparación de los alimentos. Es una forma no sólo de compartir actividades y transmitir costumbres, sino también de que ellos se animen a probar nuevos alimentos.
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Podemos tomarnos un tiempo para comer juntos, sin televisión ni celular, hablando entre nosotros de lo que le pasa a cada uno.
Si tenemos que quedarnos en casa, podemos transformar la experiencia en una que nos haga bien a todos. ¿Arrancamos junio con J de juntos? ¡Podés seguirnos en nuestras redes para más novedades!