¡Ideas saludables en curso!

Estamos acercándonos al final de la primera edición totalmente a distancia del curso “Nutrición en Juego“, que otorga puntaje docente en CABA.

Este curso “para aprender a cuidarme y enseñar a cuidarse“ nació en 2014 y desde entonces hemos realizado cuatro ediciones de manera presencial.

En septiembre lanzamos una nueva edición, por primera vez totalmente online. ¡Y la experiencia está resultando excelente!

En primer lugar, los docentes de grado y profesores de Educación Física y de materiales especiales de Ciudad de Buenos Aires pueden disponer de su propio tiempo para ingresar a la plataforma, mirar la presentación audiovisual, leer los contenidos y planificar cómo abordarlos en el aula con sus alumnos. Luego, cada semana, van compartiendo propuestas didácticas, experiencias y comentarios de los chicos.

Lo mejor es que, a partir de alguna sugerencia o propuesta, ellos van más allá y se convierten en verdaderos agentes de salud en el aula. Aquí les compartimos algunos juegos y otras actividades que los mismos docentes propusieron como una manera de reforzar los contenidos:

  • La “insignia de vida saludable“

Durante el recreo, los alumnos dispusieron stands con alimentos nutritivos y otros poco nutritivos. Los encargados les preguntaban a los demás chicos cuál era su elección y por qué. Si la elección era por un alimento nutritivo, entregaban la insignia de VIDA SALUDABLE. Si la elección era por uno poco nutritivo, los mismos alumnos explicaban las ventajas y desventajas de ese alimento.

  • El dado saludable

Era un dado con distintas temáticas en sus lados para que los chicos contestaran una trivia con Verdadero o Falso, cuáles eran las opciones que mejor hacían para la salud.

  • El intruso

A partir del trabajo con los diferentes grupos de alimentos que forman la Gráfica de la Alimentación Saludable, una docente propuso agruparlos con un intruso y que los alumnos descubrieran cuál era el alimento que no pertenecía a ese grupo.

  • El calendario de los vasos

Una docente repartió una hoja a cada alumno con los 8 vasos diarios recomendados para una correcta hidratación. Los chicos lo llevaron a casa y tenían que tachar un vaso cada vez que tomaban agua.

¡Felicitaciones a los docentes que se involucraron, propusieron nuevas ideas y lograron no sólo multiplicar los contenidos con sus alumnos sino también motivarlos a ponerse en acción!

De esta manera, los mensajes de salud y las recomendaciones accionables circularon de la escuela al hogar. Y, a su vez, los chicos replicaron lo aprendido en casa y volvieron a clase contando sus experiencias:

“Me divertí mucho con mi familia el fin de semana paseando en bici por Palermo. Vamos a intentar hacerlo durante la semana en, la plaza de mi barrio»

Y también:

«Puse botellas de 2 litros con agua en la heladera y a cada una le puse nombre de mis hermanos y jugamos a terminar de tomar la botella en el día”

¡Felicitaciones!